“A solicitud del consumidor, los
establecimientos de expendio de comida en los que se elaboren o comercialicen
alimentos destinados al consumo del público otorgan un vaso con agua potable de
manera gratuita”, detalla el dictamen.
Los dos legisladores que se
abstuvieron de la propuesta fueron Jorge Morante Figari (Fuerza Popular) y José
Arriola (No agrupado). Solo votó en contra la parlamentaria Auristela Obando
Morgan (FP).
En una disposición
complementaria del dictamen se detalla que el Poder Ejecutivo deberá
reglamentar la propuesta en un plazo no mayor a 90 días contados a partir de su
entrada en vigor. Asimismo, los establecimientos de expendio de comida se
adecuarán en un plazo de 120 días.
Durante el debate, Soto sostuvo
que en la iniciativa se señala que en el Perú existen cifras alarmantes
respecto al incremento de caso de diabetes, lo que obliga al Estado a
establecer normas en favor de la salud de estas personas.
“Por ello es importante legislar
sobre dicha problemática, más aún cuando la Organización Mundial de la Salud
(OMS) ha publicado directrices con fundamentos científicos para que los Estados
tomen acciones de prevención de las principales enfermedades no transmisibles”,
señaló el legislador.
A su turno, la congresista Susel
Paredes (Cambio Democrático-Juntos por el Perú), señaló que- en países como
Estados Unidos- lo primero que hace un mozo es entregar al cliente un vaso de
agua. A su juicio, este servicio debería darse cada vez que lo solicite un
consumidor.
“No creo que los empresarios
responsables se nieguen a darle un vaso de agua a uno de sus clientes, creo que
es lo mínimo que pueden hacer”, acotó la parlamentaria.
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